Este sábado 18 de marzo, ha sido un día importante en SEI; celebramos el Día del SEI.
Día especial para todas las personas que formamos parte del SEI. Un día de encuentro intercultural e intergeneracional que busca acercarnos y conocer a todas las personas que componemos la entidad, generar nuevos vínculos y reforzar los ya creados. Compartimos el día; menores que recién han llegado a Navarra, familias, personas voluntarias y colaboradoras así como trabajadoras, y era un encuentro abierto a todas aquellas que se quisieran sumar a la fiesta.
Nos juntamos 150 personas. La quedada fue a las 9:30 en SEI, aunque ya desde antes las personas voluntarias y colaboradoras estaban cargando y organizando materiales para que todo transcurriera con normalidad.
Desde el SEI, fuimos dando un paseo hasta Sarriguren, en el camino hicimos una parada en el lago, juegos, foto de grupo y continuamos la marcha hasta Sarriguren.
En Sarriguren, el Ayuntamiento del Valle de Egüés nos había cedido el uso de un espacio público, a quienes agradecemos mucho su disponibilidad y apoyo. Un espacio precioso y acogedor.
Además, al llegar al lugar, premonitorado y voluntariado nos han recibido con manzanas para retomar fuerza y dos bailes, flamenco y oriental, que han “decorado” el espacio y ha servido de acogida artística al lugar. La comisión ludoteca se puso manos a la obra disfrutando con los y las más txikis en la zona lúdico artística que organizaron.
Desde la mañana voluntariado y familias han estado organizando todos los ingredientes y recursos para dar comienzo al concurso de calderetes. 7 grupos, 7 calderetes que no habría sido posible sin la ayuda inestimable de la gente que apoya al SEI. También estaba Jorge, voluntario fotográfico de Tantaka, acompañándonos e inmortalizando el día.
Mientras los calderos hacían su función, tuvimos tiempo para parar y disfrutar de una conversación entre voluntariado y familias. Un encuentro muy especial. Y también hubo tiempo para el deporte y el baile.
A las 14:30 compartimos mesas y calderetes. Por cierto, muy ricos, y cada uno con un ingrediente secreto que los hizo únicos y especiales. Fue el calderete de las familias el que obtuvo el premio a mejor calderete. Y de guinda, concurso de postres interculturales. Las familias llevaron sus manjares, y ¡¡todo exquisito!! El postre ganador; Suspiro de Limeña, postre tradicional de la gastronomía de Perú.
A la tarde, después de un rato de sobremesa, tocaba el momento de los juegos. Los últimos de gran impacto; carrera de sacos y soka-tira. Sin olvidar la comisión limpieza que dejó el lugar más limpio de lo que estaba.
Aquí os dejamos la foto final y este recordatorio de lo que fue el día, para que no olvidemos que la buena compañía en un viaje hace que el camino sea más bonito y seguro.
GRACIAS POR SER Y ESTAR