Cuando hablamos de migrantes recién llegados, imaginamos una persona con mucho potencial, ganas de aprender, necesidad de crear vínculos, ganas de pertenecer y conocer la sociedad de acogida.
Sabemos que una buena acogida y un buen acompañamiento son las claves del éxito para una buena adaptación al nuevo entorno y una buena participación social.
Por ello este verano y a pesar de la situación tan excepcional que estamos viviendo, no podía ser menos y hemos abierto nuestras puertas también en Pamplona, a una remesa de 45 jóvenes recién llegados y a sus familias, que están atravesando un proceso de duelo migratorio, en muchos casos un proceso de reagrupación familiar y en algunos casos son menores no acompañados.
A lo largo de este mes de agosto estos y estas jóvenes han podido experimentar convivir en un espacio intercultural donde la acogida, la creación de vínculos con otros menores y voluntariado de Pamplona, el trabajo académico y el conocimiento de los recursos de la ciudad han sido los protagonistas. Siempre en un entorno de cuidado de la salud, con un uso obligatorio de mascarillas y divididos por pequeños grupos de 5 personas pertenecientes a unidades de convivencia a la hora de realizar las actividades.
Este acompañamiento ha dado sus frutos consiguiendo que los y las menores sientan que tienen un lugar al que pertenecer, donde se sienten seguros y ello ha generado la confianza para participar, conocer Pamplona, sus rincones y sus gentes así como su cultura.
A la vez han podido nivelar sus estudios en una primera parte del programa así como aprender castellano los y las menores que lo han necesitado.
23 personas voluntarias, 15 menores premonitores que han elaborado su proceso de duelo migratorio y las trabajadoras de la Asociación, han realizado este acompañamiento a estos menores y sus familias y gracias a ellos y a su imprescindible labor, ha sido posible que sea todo un éxito.
Han sido muchas las actividades realizadas durante este mes; desde conocer el río Arga, hasta pasar un día en la piscina, conocer el centro histórico realizando una gymkana, deporte en Mendillori, concurso de fotografía en el Caballo Blanco…hasta terminar con una despedida hasta octubre, que nos volveremos a ver para comenzar el curso escolar 2020-2021 con muchas ganas.